domingo, 3 de agosto de 2008

BIENVENIDO A "MI VIDA COMO GUS GHAIA"

Hola, bienvenido! Acabás de caer a "Mi vida como Gus Ghaia" acá podés encontrar algunos de mis escritos, pinturas, música y performances además de percepciones, opiniones e historias de vida. Ya que estamos en tema quería contarles que la colombiana se volvió a su país, si alguno le interesa todavia estoy vivo. Jajajaja!!! Otro u otra que se volvió pero a Brazil es mi primo Patricia; así que les agradecería que no me enviaran más mails preguntando si está en casa. La verdad señoritos nunca pensé que hubiera tantos interesados en el culo de mi primo travesti. No sé pero creo que viene al caso, digo, ya que estamos hablado de culos... Hace unas semanas comencé a tener un fuerte dolor abdominal que me llevó de cabeza al hospital; en el servicio de gastroenterología me mandaron unos 200 estudios; lo que no esperaba para nada fue la reacción de la doctora que casi con vehemencia sugirió que tenia que hacerme en ese mismo instante una endoscopía, la endoscopía es una técnica que permite visualizar el interior del tubo digestivo por medio de una fibra óptica que se introduce a través de la boca y que llega hasta el duodeno, (un bajón). Casi como en una película de un momento a otro estaba con toda mi humanidad en una maldita sala del servicio de gastroenterología. De pronto llega ella, una pasante hermosa, cabello negro ojos color miel, boca sensual; por un instante sentí que dios no era tan injusto, que la vida me sonreía, todo era magia hasta que ella me dijo: "Quitate la ropa!". Bien detengamonos un momento, en otro sitio si ella me lo hubiera pedido me hubiera arrancado la piel, pero estabamos en un hospital y tenía plena conciencia de que una endoscopía se realiza como antes les conté, cuestión que me hizo dudar de las oscuras intenciones que esta hermosura tenía para con migo; ni lerdo ni perezoso le hice notar esta cuestión; a lo que ella contestó: "La doctora me pidió que te prepare para una colonoscopía" que es casi lo mismo que una endo pero por el otro extremo. Entonces me levante haciéndole entender que tenía pensado seguir tal como originalmente había venido al mundo; digo; con mi culo tal y como estaba hasta ahora. Ya sé te estarás riendo, pero te puedo asegurar que no tiene nada de gracioso estar encerrado con aquella belleza devenida en una maldita sádica. No sé cual era su fijación o traumas de su niñes que la llevaron a desarrollar aquella perversión pero no tenía la intención alguna de ofrecerle "Mi trasero" mi estúpido y maldito trasero. No! Ofuscada y de mal humor se retiró. Tuve el impulso de rajarme, la puerta estaba cerrada, sólo quedaba una ventana, si saltaba desde ahí podía terminar con una pierna quebrada y algunas costillas rotas, lo pensé un instante, "Si -me dije- mi culo lo vale", a punto de saltar entra esa maldita sádica y con una sonrisa angelical me dice: "Tenías razón, fue un mal entendido". Maldita sea, un mal entendido...

No hay comentarios: